La plataforma civil EGO NON ha celebrado la jornada “ETA en la Ficción”, en la que hemos colaborado junto con el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo. Durante el evento se ha profundizado en el tratamiento cinematográfico de los crímenes de la banda terrorista ETA.
En la primera parte del evento se han visionado tres piezas audiovisuales. El primer visionado ha sido el quinto capítulo de la serie “La línea invisible”, creado por Abel García Roure, en el que se relata el primer asesinato de la banda terrorista ETA al guardia civil José Antonio Pardines en 1968. Después, se ha proyectado el cortometraje “Derbi” de Jon Viar, en el que muestra cómo el derbi vasco de fútbol cambia la relación entre dos etarras y su secuestrado. Finalmente, el cortometraje de Fernando González Gómez, “27 minutos”, ha cerrado la primera parte del evento recordando el asesinato del guardia civil Antonio Ramírez y su novia, Hortensia González, acribillados por militantes etarras el 6 de enero de 1979.
A continuación, los tres directores de los cortometrajes se han unido a uno de los líderes de la plataforma EGO NON, Íñigo de la Fuente, para realizar un pequeño coloquio. El director Jon Viar ha destacado que su corto se trata de “una comedia negra que te hace sentir mal de haberte reído, tras su final” y ha realizado una breve exposición sobre cómo ha cambiado la imagen de ETA a través del cine a lo largo de los años. Viar ha dividido esta evolución en tres etapas: desde la visualización de ETA como idealizada en los años 80; a la ambigüedad de términos entre buenos y malos confrontando a la banda terrorista con las GAL en los años 90; hasta llegar al cambio de milenio con el que comienzan a aparecer las primeras piezas en las que se capta el punto de vista de las víctimas.
Asimismo, el director y a su vez protagonista de su corto, ha trasladado que frente a la producción de películas referentes a la historia de ETA: “No hay voluntad política para contar un relato de lo que ha pasado. Sí hay voluntad para crear un relato con el que la izquierda abertzale se sienta cómoda”. Frente a esta perspectiva, Viar ha subrayado que continuará trabajando sobre esta temática, condenando así los crímenes de la banda terrorista: “Yo condeno el proyecto racista por el que mataron. Un proyecto racista por el que pusieron una frontera donde no la hay”, ha manifestado.
Por su parte, Abel García Roure, que desde su serie intenta trasladar el punto de vista de los etarras, ha advertido de que actualmente “se está intentando reivindicar la figura de Txavi” y ha expresado que se ha de “desmitificar” el relato de ETA. Ante la falta de información sobre el tema del terrorismo de ETA en España y la carencia de piezas al respecto, el director y productor ha destacado que “es importante que como sociedad reclamemos que se hable de estos temas”.
Por último, Fernando González Gómez ha relatado el crimen a cuyas víctimas homenajea con su corto y cuyas escenas están enmarcadas por el desgarrador sonido de la bocina del coche de Antonio Ramírez tras el atroz ataque. González Gómez ha señalado que “la ficción y el arte están para transgredir y contar historias que incomoden. Es una pena que sólo cosas de pequeño formato e independientes puedan contar cosas incómodas”.
El hijo de Modesto Carriegas Pérez, asesinado por ETA en 1979, ha impartido una conferencia a los alumnos del Colegio CEU Virgen Niña Vitoria.
El académico de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España, Francisco Miró-Quesada, ha esbozado la complicada situación.
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