El 12 de octubre se conmemora la fiesta nacional de España, para ser más exactos, el día de la Hispanidad. Una fecha que fue elegida en 1892 con motivo del IV centenario de la llegada de las carabelas al mando de Cristóbal Colón a las tierras americanas. Ésta es la efeméride de cómo de un error cartográfico se convirtió en la presentación de todo un continente nuevo al otro lado del océano Atlántico.
Lejos de la conformación de un imperio en el que “jamás se ponía el sol” y de laudes a la época imperial española, el sentido del 12 de octubre se configura en torno a otro concepto: la Hispanidad. Ésta fue el resultado de la mezcla de tradiciones, el deseo de combinar ambas culturas y las relaciones entre los españoles y los nativos como iguales tras las leyes de los Reyes Católicos -que dieron órdenes claras de defensa de los indios-.
La llegada de los españoles a América enseñó que no sólo se podía “colonizar” y destruir la cultura nativa de un territorio recién anexionado como hicieron otros imperios coloniales, sino que existía otra vía, la integración basada en el respeto y convivencia con los nativos que tuvo resultado el mestizaje.
Por otra parte, la fecha invoca a la Virgen del Pilar, la patrona de la Guardia Civil y de la ciudad de Zaragoza. Cuenta su historia que en el año cuarenta después de Cristo mientras el apóstol Santiago y sus discípulos descasaban en la antigua ciudad de Caesaraugusta (Zaragoza) en su travesía hacia Galicia, escucharon cantos celestiales que entonaron “Ave María gratia plena” y se apareció la Virgen María sobre un pilar de mármol. La divina visión ordenó a Santiago que construyese en ese mismo lugar una iglesia que ”permanecerá este sitio hasta el fin de los tiempos para que la virtud de Dios obre portentos y maravillas por mi intercesión con aquellos que en sus necesidades imploren mi patrocinio”.
Ese mismo día quince siglos después, Colón pisó tierra firme en el Nuevo Mundo, y por ello la Virgen del Pilar fue la escogida como patrona de la hispanidad. La hispanidad se presenta como un fenómeno metafísico que afectó a niveles más profundos que la creación de un código legal o los intercambios comerciales. Sino que el concepto representa el espíritu de unión resultante de un intercambio cultural y lingüístico y a la creación de un nuevo concepto de España unida con el Nuevo Mundo, América bajo una misma Corona.
La llegada al trono del posterior monarca, Carlos I, consolidó esa relación e introdujo en su influencia a los territorios asiáticos. Este paso conformó un imperio cimentado en la unidad a través de una legislación común que no marcó ninguna diferencia entre los hispanos europeos, los hispanoamericanos y los hispano asiáticos.
De esta forma, como expone la Ley 18/ 1987, del 7 de octubre, que establece el día de la Fiesta Nacional de España el 12 de octubre dicta que: “La fecha elegida, el 12 de octubre, simboliza la efemérides histórica en la que España, a punto de concluir un proceso de construcción del Estado a partir de nuestra pluralidad cultural y política , y la integración de los Reinos de España en una misma Monarquía inicia un período de proyección lingüística y cultural más allá de límites europeos”.
Frente a los que exclaman que ese día “no hay nada que celebrar”, la Fiesta Nacional invoca a los pilares en los que se construyó la conciencia de nación española: la mezcla de culturas, el espíritu católico y unificación bajo una misma Corona. Del Imperio romano pasando por los Reyes Católicos, la Paz de Westfalia y llegando hasta la actualidad, todos los hechos pretéritos conforman la base sobre la que se construyó el concepto de nación e identidad hispana y la llegada a América uno de sus episodios claves.
El 12 de octubre se celebra la proyección lingüística, religiosa y cultural de una región mediterránea que logró expandirse hacia medio mundo. Se conmemora la hispanidad como nexo de unión espiritual entre personas de territorios lejanos pero con una tradición compartida. Se recuerdan nuestros primeros pasos como nación y nos lega la misión a todos aquellos que hoy leemos estas líneas de que abracemos el apego a una patria como lugar común de los españoles e hispanos, honremos a los que fueron antes que nosotros y su legado y exclamemos que España y la cultura hispana siguen vivas y se mantendrán para las generaciones futuras. Por tanto, el 12 de octubre hay ”todo que celebrar”.